Amado
Dios, tu obras de maneras misteriosas, a veces tu voluntad escapa de mi
entendimiento, por eso te pido que me ayudes a confiar en ti como lo hizo tu
siervo Job, que en medio de sus tormentos te puso a ti por esperanza.
Padre,
quier estar siempre bajo tu amparo, por eso te pido que hagas de mi un hijo
obediente, que tu voluntad pavimente el camino que he de seguir todos los días
de mi vida.
Señor,
si me salgo de tu voluntad con mis actos, por favor corrígeme, hazme entender
tu palabra de vida, que tus mandamientos estén siempre en mi memoria, porque
quiero poner mi voluntad a un lado para seguir la tuya.
Dios,
aunque muchas cosas en la vida estén nubladas, aunque no pueda ver lo que me
prepara el incierto futuro, aunque las circunstancias sean desfavorables y
aunque mi alma pudiera estar llena de tristeza, con todo yo pondré en ti mi
confianza, pues solo tú puedes guiarme hacia la paz verdadera.
Mi
Rey de gloria, guíame a una vida llena de ti. Quiero que cada aspecto de mi
existencia esté conectado contigo: Mis talentos, dones, virtudes y todas las
cosas que me has dado, te las quiero entregar para exaltarte.
Gracias padre por escuchar siempre mis oraciones, en el nombre de Jesús todo está hecho. Amén.