Deseamos comenzar con un versículo muy interesante respecto a la sabiduría de Dios y es el siguiente:
Proverbios 2:1-6
2:1 Hijo mío, si recibieres mis palabras,
Y mis mandamientos guardares dentro de ti,
2:2 Haciendo estar atento tu oído a la sabiduría;
Si inclinares tu corazón a la prudencia,
2:3 Si clamares a la inteligencia,
Y a la prudencia dieres tu voz;
2:4 Si como a la plata la buscares,
Y la escudriñares como a tesoros,
2:5 Entonces entenderás el temor de Jehová,
Y hallarás el conocimiento de Dios.
2:6 Porque Jehová da la sabiduría,
Y de su boca viene el conocimiento y la inteligencia.
Como vemos, el versículo 5 nos habla de ENTENDER el temor de Jehová. Se nos dice que el principio de la sabiduría es el temor a Jehová (Proverbios 1:7), entonces el énfasis que debemos tener como creyentes es entender qué es el temor a Dios.
Ahora bien, los versículos del 1 al 4 nos revelan cómo entender el temor de Dios y se logra:
1- Recibiendo su palabra: La palabra de Dios es viva y eficaz, esa dulce palabra que recibimos de su parte tiene el poder de alinear nuestras vidas a su voluntad.
2- Guardando sus mandamientos: Los mandamientos de Dios tiene el poder de llevar nuestras vidas por los caminos del bien y la justicia, haciéndonos entender todo aquello que resulta abominación a nuestro Padre Celestial.
3- Prestar nuestros oidos a la sabiduría: Es decir, escuchar consejos sabios y los practicarlos, tener deseo de escuchar la interpretación de la palabra de Dios y en general oir todo aquello que sea del agrado de Dios.
4- Tener una vida llena de prudencia: De este modo nuestros actos no nos llevan al riesgo de muerte o de herir y/o afectar a otras personas. Ejemplo: Es bueno trabajar el campo y comer de sus frutos, pero es de prudentes guardar alimentos de reserva por si acaso llegan tiempos de escasez.
5- Clamar a la inteligencia: Es decir, ejercitar nuestra mente en todo aspecto positivo, ya sea a nivel físico como tambien a nivel espiritual, de este modo podemos ser rápidos en dar respuestas acertadas y para tomar buenas desiciones, donde siempre estén incluidas los deseos de Dios.
6- Buscar más sabiduría: En este punto, es necesario aclarar que estamos hablando de intrar a niveles más profundos. Hablamos de buscar la sabiduría en todas las cosas que Dios hace, la cual la podemos hayar claro está en su palabra, pero también en su creación. Ser un buen observador y entender cómo está Dios presente en toda su creación nos lleva a querer buscar más de su sabiduría.
Esperamos que este pequeño análisis te haya gustado y te pueda ayudar en el crecimiento espiritual. ¡Amén!
